domingo, 14 de noviembre de 2010

Menos dudas mas certezas


Hace un mes atrás, antes de la muerte de Néstor, los kirchneritas teníamos algunas certezas y muchas dudas. Hoy el panorama nos ha cambiado, en algunos puntos radicalmente y en otros no tanto.  
Las encuestas daban señales de vida para el gobierno. Las importantes medidas tomadas, sobre todo en el último año, como la asignación universal por hijo, la ley de medios o el matrimonio igualitario pujaban por posicionarlo favorablemente . Esto era una certeza pero estaba la duda de si alcanzaría después de la dolorosa derrota sufrida en los comicios del 2009. Se sabía también que el gobierno era la única propuesta progresista frente a una oposición decidida a recomponer el "Status Quo" que precedió al gobierno del pingüino. Esto también planteaba dudas acerca de las posibilidades concretas del gobierno de recuperarse frente al electorado.
El humor del pueblo distaba mucho de dar garantías de acompañar el modelo, sin embargo la curva descendente se había torcido y la oposición se fragmentaba cada vez mas debilitándose a fuerza de terquedad.
Un perro persiguiendo su cola no es atractivo de conjugar los deseos colectivos en tiempos en que tambalean las grandes potencias y los paradigmas neoliberales. El mundo entero parece ser ese perro, el "Tea Party" en EEUU, o el ajuste en Grecia, Francia y España son "realitys" diarios que la gente ve y reconoce en la historia reciente de nuestra democracia. Sin embargo el poder de las corporaciones mediáticas y su gran aparato de logística para conducir la opinión pública hacia intereses propios es basta como para complicar las cosas. Aún hoy, que el gobierno ha sabido leer esta coyuntura y ha desarrollado una democratización de medios que es vanguardia en América latina, siguen estas corporaciones monopólicas teniendo un poder suficiente para ser el principal bastión de defensa de la oligarquía. 
La muerte de nuestro líder fue un shock enorme, cuyas consecuencias negativas distan de emerger en el corto plazo. De un lado a otro de las aguas nos preguntábamos ¿Como sigue esto? Se plantearon muchísimas dudas acerca de la gobernabilidad, las lealtades, el PJ, la CGT, la mesa chica, etc. Sin embargo luego del contundente apoyo popular y el revisionismo histórico que trajo a la fuerza su muerte demostró lo que presentimos. Intuíamos que en el momento crucial se pondría blanco sobre negro y el modelo y sus conductores serian revalorizados por la opinión pública. Esto sucedió de inmediato y superó nuestras expectativas.
Otra cara de este nuevo mapa era la oposición, crispada pero sin pasión, debía decidir si continuaba persiguiendo su cola alentada por Magneto y compañía o si iba a reconocer el sin sentido de esta acción.
La sesión por la ley de presupuesto de esta semana dejó varios punto para analizar. El primero es que el gobierno sigue firme en su estrategia, no tiene por qué cambiar, ni porque someterse frente a un poder sin representación y debilitado. La UCR sigue escondiéndose en un falso discurso de institucionalidad cuyas contradicciones Carrió parece hurgar sin escrúpulos, ante la mirada cansina de sus correligionarios. Esto seguirá de igual manera hasta el fin de los tiempos porque no hay una perspectiva de gobernar en ellos.
 Distinto es el Pro que así como boicotea el proyecto en diputados sufrirá la misma carta en la legislatura y por consiguiente obliga a otras discusiones de puertas adentro. Discusiones que hubieran preferido no tener pero que le son propias a quien gobierna una ciudad o una provincia. 
El peronismo federal, al cual a esta altura se lo podría denominar el Peronismo de derecha, se le fue de pista el personaje más bizarro pero a la vez el más popular de su bastión, dejando la puerta abierta para nuevos despistes como por ejemplo el del único candidato con discurso (y solo discurso) progresista quien ya adelantó un parte médico letal la semana pasada al decir "no tenemos militancia, no tenemos juventud, y ninguno de nosotros mide más de diez puntos en las encuestas" estamos muertos podría haber agregado.
 Por último los extraños sectores de izquierda, que han perdido el norte y también el sur, naufragan hacia la ruptura y la pérdida de legitimidad perdiendo la importante militancia que supieron construir estos años a las que no pueden darles razones claras de sus decisiones ni tampoco practicar la horizontalidad que pregonan en sus mesas directivas. ¿Cómo continuará la película en el congreso?  Sin cambio, parece ser el título. Utilizarán todos los recursos que estén al alcance de su mano, por mas irrisorios que parezcan. No debería descartarse las peores operaciones político-mediáticas en el último tramo de la carrera. Como lo sucedido esta semana con las falsas denuncias de coerción, que solo serán doblegadas si el oficialismo mantiene el rumbo y si no estallan las contradicciones internas latentes de sus patas mas enclenques.
Menos dudas y más certezas tenemos hoy, lo que no significa observar con ingenuidad el panorama político, sino por el contrario, trabajar con los nuevos elementos de juego como la militancia y los jóvenes, presentar de manera clara los objetivos ante la ciudadanía y dejar que el resto decante por su propio peso.
por che_diego

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